Hacer deporte es algo muy recomendable, necesario para tener una vida saludable, por lo que todos debemos esforzarnos por incluirlo en nuestra rutina. Además, el entrenamiento al aire libre tiene muchos más beneficios, por lo que si puedes deberías hacerlo de este modo.
Veamos cuáles son los beneficios más destacados del ejercicio al aire libre, además de unos consejos útiles para un buen entrenamiento en exteriores.
Ventajas del entrenamiento al aire libre
Algunos de los beneficios que aporta entrenar al aire libre son:
- Favorece la asimilación de vitamina D en el organismo. La exposición a la luz solar permite al cuerpo generar esta importante vitamina, esencial para que el calcio se fije en los huesos.
- El entrenamiento al aire libre estimula el cerebro y ayuda a la relajación, lo que contribuye a que la experiencia sea mucho más agradable.
- Potencia la conexión con el entorno natural, aumentando la confianza y estrechando lazos con lo que nos rodea.
Por estas y otras razones, el entrenamiento al aire libre debería ser la principal manera de hacer ejercicio.
Consejos para hacer deporte al aire libre
Con la pandemia, muchos deportistas se vieron obligados a salir al exterior para mantenerse en forma. Ahora se vuelven a abrir los gimnasios, aunque entrenar al aire libre sigue siendo muy recomendable.
Eso sí, es crucial tener en cuenta algunos consejos para disfrutar al máximo cuando se practica ejercicio en espacios exteriores.
Iniciarse con ejercicios suaves
Si no eres un deportista experimentado, o hace tiempo que no te ejercitas, es muy importante comenzar con ejercicios suaves y no forzarse demasiado. Sobre todo en los inicios, porque se podrían producir lesiones por no entrenar de forma adecuada.
Otro detalle fundamental es hacer un calentamiento previo y estirar los músculos antes de ponerse en marcha. Los primeros 5-10 minutos deben ayudar al cuerpo a prepararse para el ejercicio, y hacer ejercicios de intensidad baja e ir añadiendo otros según se vaya avanzando.
Se puede empezar haciendo una tabla de ejercicios cortos, y aumentar la intensidad, frecuencia o tipo de ejercicio cuando veas que puedes ir un poco más allá.
Bien equipados
Un consejo obvio, pero esencial, es utilizar ropa deportiva adecuada en función del tipo de superficie en la que se vaya a entrenar y del clima. Lo mejor es escoger prendas que favorezcan la transpiración, que sean frescas en verano y abriguen en invierno. También que sean ligeras y cómodas.
Otra parte del “equipamiento” tiene que ver con practicar deporte en compañía y tratar de entrenar con alguien a tu lado, sobre todo cuando se va a salir al aire libre en épocas en las que hace calor. Así tendrás ayuda si por algún motivo tienes una bajada de tensión o sufres algún incidente.
Mantener una buena hidratación
Beber suficiente agua es fundamental cuando se hace un entrenamiento al aire libre, y no solo en verano. Se debe mantener la hidratación tomando pequeñas cantidades de forma regular tanto para seguir el ritmo como para evitar calambres mientras entrenas.
Sí, tal vez no lo sepas, pero una de las causas de sufrir un calambre tiene que ver con la falta de hidratación. Por tanto, cuanto mejor hidratado esté tu cuerpo, menos posibilidades de que sufras un calambre mientras entrenas.
Protección solar
Otro detalle importante cuando entrenes al aire libre es protegerte del sol durante todo el año. Incluso cuando está nublado, los rayos del sol pueden afectar de forma negativa si te expones sin protección.
Lo recomendable es aplicarte protección solar antes de salir a entrenar, y volver a hacerlo si pasas más de media hora entrenando para proteger tu piel de los efectos nocivos de la radiación.
Jardines y parques, mejor que calles y aceras
Aunque vivamos en ciudades, los mejores espacios para entrenar al aire libre son aquellos que proporcionen alguna zona verde, como jardines o parques. Lo bueno es que la mayoría de ciudades cuentan con estos, e incluso tienen instalaciones para hacer deporte allí.
También se recomienda buscar áreas de sombra donde entrenar de un modo más agradable, y por sitios que no estén masificados para moverse sin problemas.
Ponte en marcha y disfruta de una vida saludable haciendo deporte al aire libre. Tu cuerpo te lo agradecerá.
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